SAN PEDRO DE MACORÍS, R.D. (VIPRENSA).- El temor se ha apoderado de los residentes en residenciales de San Pedro de Macorís, debido a la constante persecución de los obreros de nacionalidad haitiana que trabajan en diversos tipos de construcciones, por parte de agentes de Migración y la Policía Nacional.

Los habitantes en estos residenciales se quejan porque a diario los obreros haitianos son perseguidos causando intranquilidad en esos sectores, ya que corren de un lado a otro para huir de la persecución de los agentes.

Entre esos Residenciales están; Naíme I, II y III, Altos de San Pedro, Villa España, Villa Marina, Cañaveral de Oriente y otros, donde sus residentes se quejan de la acción y les piden a las autoridades hacer las detenciones, pero de forma adecuada.

Indicaron que el conductor de la camioneta marca Chevrolet, blanca, placa EL 09716, representa un peligro para la ciudadanía, ya cuando los extranjeros huyen para escapar de su detención, este les indica a los agentes que le disparen, por lo que temen que se produzcan muertes innecesarias y, llaman a las autoridades de Migración ponerle atención a esta denuncia.

De su lado, Santo Sánchez, dirigente de la Confederación Nacional de Trabajadores Dominicanos (CNTD), entiende que el Gobierno debe respetar los protocolos que establece el Derecho Internacional, ya que el mismo es universal consagrado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

“Creo que el hecho de que el país sea soberano de detener o deportar a un ciudadano extranjero, esto no le da la potestad para violar los derechos humanos, por lo que entiendo que la dirección de Migración debe de adoptar esos protocolos que establece el Derecho Internacional, por lo que la migración debe ser basada en esos instrumentos”, señaló el dirigente de la CNTD.

Sánchez dijo que rechaza que en ese proceso de deportación de ciudadanos de cualquier país que no estén de manera regular, se esté haciendo de esa forma, por lo que pide que se respete los derechos humanos.

Entiende que el regular a cada ciudadano que vaya a cualquier país, es una soberanía, pero que debe hacerse como está establecido sin tener que incurrir en maltratos y sin violar los derechos humanos.