El Malecón de San
Pedro de Macorís: Historia y Encanto Renovado
Por Ramón Díaz Mejía, Historiador
Publicado el 23 de diciembre de 2024.
SAN PEDRO DE MACORÍS, R.D.
(VIPRENSA).- Cuentan las leyendas que el célebre
pirata Cofresí solía refugiarse en la mítica Playa de Muerto y
que, según rumores, dejó enterrados algunos de sus tesoros en
esas costas. Aunque nunca se ha comprobado la veracidad de esta
historia, lo que nadie puede negar es que el Malecón de San
Pedro de Macorís es un verdadero tesoro para la ciudad. Ubicado
frente al azul infinito del mar Caribe, este espacio es un punto
de encuentro vibrante para todas las generaciones y clases
sociales, ofreciendo brisa fresca, espectaculares atardeceres,
música, baile y una energía inconfundible.
El pasado sábado 21 de diciembre, el Malecón fue reinaugurado
por el Ministerio de Turismo, recuperando el brillo que tanto
merece. Renovado y revitalizado, está listo para seguir
escribiendo nuevas historias y consolidándose como el corazón
latente de San Pedro de Macorís.
Un Viaje a su Historia
La avenida que recorre el Malecón lleva el nombre del célebre
poeta Gastón Fernando Deligne, cuya estatua preside la rotonda
que marca el inicio del paseo. Oficialmente inaugurado el 1 de
agosto de 1971, durante el mandato del presidente Joaquín
Balaguer, este proyecto nació con el objetivo de fortalecer el
turismo en la ciudad. Su construcción estuvo íntimamente ligada
al icónico Hotel Howard Johnson (Macorix), que por décadas
simbolizó el auge turístico de San Pedro de Macorís.
Antes de que existiera el Malecón como lo conocemos hoy, entre
1910 y 1911 se levantó un paseo peatonal conocido como la
Calzada del Caribe, diseñado por el ingeniero Octavio Acevedo.
Este primer esfuerzo urbanístico reflejaba el deseo de los
petromacorisanos por aprovechar las bellezas naturales de su
litoral.
Los terrenos que ahora ocupan el Malecón formaban parte de las
propiedades del hacendado Elías Camarena, quien también fundó la
primera escuela de la ciudad. La construcción del Malecón
moderno se desarrolló en dos etapas: la primera, inaugurada en
1971, abarcó desde la calle Sánchez hasta el parque infantil,
con un costo de medio millón de pesos. La segunda etapa,
completada en 1973, extendió la avenida hasta la Playa de
Muerto. Ambas fases estuvieron a cargo de los ingenieros
petromacorisanos Roberto y Rudy Haché Malkún.
Espacios Inolvidables del Pasado
La construcción del Malecón y del Hotel Macorix trajo consigo
cambios significativos, incluyendo la desaparición de algunos
lugares emblemáticos que aún viven en la memoria colectiva:
• Los Coquitos: Una encantadora enramada rodeada de cocoteros,
ideal para fiestas y encuentros familiares. Contaba con un bar,
un restaurante y un pequeño parque con bancos frente al mar.
• El Canamar: Similar a Los Coquitos, pero más moderno y
pequeño. Fue propiedad de Ramón Solano Alfonseca, conocido por
sus populares Discos Mimí.
• Casino de Miramar: Un lugar icónico para bailar y disfrutar,
famoso por "El baño de Moisés", un espacio en el mar donde las
olas entraban y salían por ranuras en las paredes.
• Villa Clara: Una elegante residencia que albergó al doctor
Carl Theodor Konrad Ludwig Georg y su esposa Eleonor.
El Malecón Hoy: Memoria y Modernidad
Con más de 50 años de historia, el Malecón de San Pedro de
Macorís ha sido testigo de la transformación de la ciudad.
Aunque el icónico Hotel Macorix cerró hace años y muchas
discotecas legendarias, como Café Caribe, quedaron en el
recuerdo, el Malecón sigue siendo el alma vibrante del pueblo.
Hoy, tras su reciente renovación, el Malecón brilla con nueva
vida. Sus aguas cristalinas, su brisa inconfundible y el calor
de su gente hacen de este lugar un destino imprescindible. Aquí,
las historias del pasado se entrelazan con las nuevas vivencias,
y cada visitante encuentra su propio rincón especial frente al
Caribe.
San Pedro de Macorís tiene un Malecón único, un espacio que
combina historia, naturaleza y cultura, reafirmando su lugar
como el símbolo más querido de la ciudad.